La ensalada perfecta
En la costa levantina, el capellán (bacaladilla salada) es uno de esos pequeños manjares, quizá desconocido en otras zonas, pero muy apreciado por todo el que tiene la suerte de conocerlo y degustarlo.
Se trata de una bacaladilla que, una vez abierta y eviscerada, se lava con agua y sal, y se deja secar con la brisa marina, tradicionalmente en las barcas, lo que aporta su característico e intenso sabor al capellán. Su consumo es muy habitual en ensaladas, una vez asado (en brasas o directamente al fuego), y desmenuzado, aunque es habitual también asarlo y degustarlo con aceite, o sin él, durante un almuerzo o un aperitivo, acompañado de una cerveza fria.
Capellán entero Podemos encontrarlo asado y desmigado, conservado en aceite de oliva.
La ensalada de capellanes es considerada por muchos en la zona levantina como la ensalada perfecta, nosotros lo pensamos, sencilla, sabrosa y completa. Os animamos a probarla, os va a encantar.
INGREDIENTES
- Capellán
- Tomates para ensalada
- Aceitunas partidas
- Encurtidos (opcional)
- Sal
- AOVE
ELABORACIÓN
Asamos el capellán, en brasas o directamente con la llama del fuego de la cocina (si no disponemos de fuego directo podemos adquirirlo ya asado y desmigado).
Una vez asado, desmigamos el capellán y reservamos. Cortamos unos tomates en gajos y los ponemos en un bol para ensalada, echamos sal y añadimos el capellán desmigado y unas aceitunas partidas, rociamos con un chorrito de aceite y a disfrutar.
Existen variantes, se le puede añadir encurtidos, que le dan un plus muy interesante. Tápenas, pepinillo, cebollitas, son opciones que le añaden a nuestra ensalada un punto extra.
Esperamos que os guste y disfrutéis de esta sencilla pero espectacular ensalada.
